viernes, 28 de abril de 2017

Ninfa...Rubén Darío...Franco

De la ninfa de Rubén Darío a la de Francisco Franco.

¡el poeta ha visto ninfas!...
Rubén Darío, AZUL

Ha poco han dado por televisión, en hora de gran audiencia, "La princesa Paca", una muy interesante cinta sobre la amante española de Rubén Darío. El origen del guión, al que encontré algún fallo, es un texto de Rosa Villacastín, de cuya  escritura guardo buen concepto en tiempos de abogado empresarial en foros remotos.

En un momento, Paca, jardinera analfabeta, a la que el gran poeta enseñaría a leer, está preocupada por su desconocimiento del significado "Ninfa", que alguien le lee en Azul, denominación con la que también le llama su enamorado.

La historia de Paca contada en cine resulta conmovedora. Me trae al recuerdo uno de los primeros pleitos que tuvo mi padre, joven abogado, antes de matrimoniar con mi madre. Resulta que en una tertulia ovetense el Conde de Rodríguez-Sampedro había, en frase ingeniosa, llamado a Franco, "la ninfa egeria de la Justicia". Un joven falangista presente procedió a la correspondiente denuncia que, por lo pronto, dio con la detención del conde por desacato al Jefe del Estado. El dentista valdesano Evaristo Lombardero y el oftalmólogo ribadense Honesto Suárez, que coincidieron con Rodriguez-Sampedro en la cárcel, me narraron detalles impagables del sucedido, entre los que estuvo la anécdota de otro compañero del denunciante que "de oídas habría agravado la frase pues el calificativo al Jefe del Estado del testigo falso fue "¡Bella ninfa!", el colmo del recochineo".

Semejante despropósito aberrante no fue solo en los remotos años cuarenta, pues aún en los sesenta un investigador científico, residente en Alemania, de la familia Pérez Campoamor, fue sometido al Tribunal de Orden Público sobre un comentario despectivo hacia Franco mientras escanciaba sidra en la avilesina Casa Lin. Esa misma jurisdicción especial de triste recuerdo también se aplicó al Juez de Mieres, Eulogio García Fernández, por una frase que habría dicho a un miembro de la siniestra Brigada Social el 1/5/1964 y aún en los setenta al notario José Rosales, por escribir en un tonel de El Condado/Laviana ¡Viva el General Riego!, a presencia de M.A.Lombardía y los Barbón, que hubo quien aseguró haber leído "¡Viva la Pasionaria!", lo que poco se hubiera compadecido con la militancia socialista del inolvidable fedatario.

En fin...como escribió Shakespeare, ¡"las cosas que hemos visto!".

Me alegra que el apasionado amor olvidado de Rubén Darío haya sido rescatado. En cuánto a Franco resulta que todas las hagiografías, desde Joaquin Arrarás en 1937 para acá, dan el primer domicilio del joven Franco en Oviedo el Hotel de París, en la calle Uria, cuando fue una pensión situada en la calle Rosal, donde está ahora la cafetería Solera, espacio pintado por Paulino Vicente en un magnífico cuadro de propiedad municipal.

Lne:COMAS:Hace 50 años nos manifestamos por Vietnam y Ventura Franco

28-04-2017 00:18
0 votos
1
De izquierda a derecha, Fernando Comas, Francisco de Asís Fernández, Cheni Uría y Antonio Masip. IRMA COLLÍN
"La manifestación de apoyo a Vietnam que se celebró en Oviedo el 27 de abril de 1967 fue la primera gran concentración en la ciudad desde la República y también una protesta contra el franquismo". Así lo señaló ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA Fernando Comas, entonces un joven estudiante, uno de los organizadores de la protesta, de la que ayer se cumplieron cincuenta años. 
Comas destacó la violencia policial con la que saldó la movilización, "realmente aquello no fue un paseo, nos pasearon a nosotros". Francisco de Asís Fernández Junquera también estuvo aquel día manifestando su solidaridad con el pueblo vietnamita, en plena guerra con Estados Unidos. "En realidad, la manifestación también fue una protesta contra el régimen de Franco". Francisco de Asís añadió que si algo quedó patente ese día es que en el pueblo español algo estaba cambiando muy de prisa. "También había gente que nos insultaba y nos llamaba 'señoritos' y 'mangantes' ", añadió. Otro de los participantes fue el filósofo Gustavo Bueno Martínez, que no pudo hablar desde el Escorialín, como estaba previsto, debido a la tensión generada con las fuerzas del orden. La prensa nacional también hizo referencia a la manifestación en la que también participó Cheni Uría, con 18 años, quien calificó la guerra de Vietnam como "el gran mito de nuestra generación, algo muy especial para todos nosotros". El verano anterior había ingresado en el Frente de Liberación Popular y en la Universidad. Antonio Masip aseguró que la protesta cambió la percepción que se tenía en España del movimiento estudiantil ovetense, "al que se veía como una especie de isla".
Compartir en Twitter
Compartir en Facebook

jueves, 27 de abril de 2017

Funeral x don Luis Legaspi/El Comercio

Además de decenas de sacerdores, entre los asistentes también había rostros conocidos de la sociedad ovetense, como la galerista Guillermina Caicoya, el presidente de la Sociedad Filarmónica, Jaime Álvarez-Buylla, y el exalcalde Antonio Masip, amigo suyo. «Una persona entrañable y sabia, me habló de la biblioteca de Castropol y la guerra civil. Era siempre el primer votante en la plaza Porlier», recordó.

martes, 25 de abril de 2017

Aula Magna sobre Indalecio Prieto y América 20 Marzo 2017

Estimados Rector, Alcalde, Vicerector, Decano, Querido Arístides Royo, queridos amigos:

Voy a hablarles de un ovetense ilustre, Indalecio Prieto Tuero, nacido unas calles más arriba, en el número 25, hoy 23, de Magdalena donde colocamos una placa en su centenario que, hogaño, querido Wenceslao, Alcalde, debería mejorarse.

Es curioso que de los tres homenajeados en esta mesa, resulta que es el único que no traté personalmente, pues sí tuve el honor de conocer a Renato Ozores, tan bien glosado por el presidente Royo, y a Wenceslao Roces, del que se ha ocupado también magníficamente Benjamin Rivaya.

Permítanme que muestre todo mi afecto al expresidente panameño y a su esposa. Aristides es asturiano consorte y como tal le conocí en La Habana en la Cumbre de Países No Alineados, en cuyo séquito acudían su predecesor Omar Torrijos y una gran personalidad que meses después sería Ministro español de Justicia, el muy querido Fernando Ledesma, que solucionaría uno de los importantes problemas de esta región con el cierre de la llamadas cárceles modelo ahora Archivo Histórico.

La familia Royo ha sido incondicional de nuestras fiestas mateínas y su presencia entre nosotros es siempre gratísima y enriquecedora como acabamos de constatar esta misma tarde.

Don Arístides nos ha hablado de don Renato Ozores y yo no puedo menos que corroborar sus palabras, su afecto y su entusiasmo. Renato fue un asturiano de calidad. Fui testigo cualificado de esa imagen llorando ante la Catedral a su vuelta del exilio. La última vez, el matrimonio Ozores se alojó en el Hotel España desde donde les acompañé en el momento de esa llantina de la Plaza de la Catedral, a la que se ha referido el Doctor Royo. Don Renato, un magnífico escritor, cuya obra sus hijos han donado emotivamente a la Biblioteca de El Fontán, se fue de Asturias el 12 de Octubre de 1937 y no quiso legítimamente volver a la locura de la guerra que duraría aún casi dos años. Esa decisión permitió otra imagen a la que entrañablemente se refirió donAristides, el conocimiento de Rita, pronto su mujer. Me consta que vio por primera vez el Pacífico a la vez que los grandes ojos de Rita de los que quedó prendado  con el fondo de la mar océana.

Nos acoge su Facultad de Derecho y en su brillante trayectoria estuvo la Cátedra de Derecho Mercantil, colega pues de Aurelio Menendez, al que también se hizo referencia con el entusiasmo en el que insisto,

Y Wenceslao Roces, al que visité en su casa de México, suegro de un gran ovetense, Ramón Buyllla y abuelo de Arturo, premio Principe de Asturias. Como saben el Premio Nobel suele venir detrás.

Wenceslao, del que en algún libro recogí ya la anécdota que cuenta el profesor Rivaya de su llegada a Oviedo desde Soto de Agües, fue senador en las Cortes Constituyentes, traído desde México a iniciativa de Juan Luis Rodríguez Vigil, que luego sería Presidente de Asturias.

Pero vayamos a la encomienda que se me hace expresamente de hablarles de Prieto.
Se suele afirmar que Manuel Azaña fue el mejor escritor entre los políticos republicanos españoles. Yo no soy imparcial para decir otra cosa, pero acabo de escuchar al que según mis grandes amigos, el poeta Angel Gonzalez y el académico Emilio Alarcos Llorach, era,es, el crítico literario más reconocido, José Luis García Martín, director de Clarín,que el mejor escritor es don Inda, don Indalecio Prieto.

Este fue además un gran americanista. 

Su contacto y seguimiento constante con la realidad latinoamericana se produce en París, en su primer exilio de la Dictadura de Primo deRivera. En París, creo que en el Hotel Mont Tabor, en la pequeña calle de su mismo nombre, detrás de la rue de Rivoli y la Place de la Concorde. Allí don Inda se interesa por la democratización de las repúblicas americanas, y de forma especial por México y Chile.

Sobre don Inda y sus viajes a Oviedo tengo una publicación en el catálogo de la exposición que ha patrocinado la Fundación Indalecio Prieto, que preside el asturiano Alonso Puerta, y con la que tanto colabora Etelvino González,al que felicito por su libro sobre otro ovetense, Teodomiro Menendez, tan íntimo de Prieto del que sería Subsecretario y confidente.

Pues Teodomiro Menendez acompaña a Prieto, tras cenar en su casa en la Cuesta de la Vega, a la playa del Aguilar al llamado desembarco de las armas del Turquesa.

Creo que es obligado decir aquí, precisamente en la Universidad, víctima de los sucesos lamentables de 1934, el arrepentimiento expreso de Prieto en un acto celebrado en el Centro Español de México, que pide perdón ante los trabajadores españoles, ante el pueblo español por una revolución, mejor unos sucesos revolucionarios, en la que participó tan destacadamente. Tengo el compromiso conmigo mismo, que espero cumplir antes de, en definitiva, irme, de explicarme cómo un reformista, que es lo que define a Prieto,se encuentra inmerso, y casi al frente del momento de desencadenarse,de una revolución.

Cuando Prieto, en plena guerra, deja el Ministerio de Defensa por conocidas disensiones, el Presidente del gobierno Juan Negrín, pretende, basado en las magníficas relaciones latinoamericanas que el ovetense seguía cultivando, se traslade, cruce el charco, de embajador plenipotenciario. El 14 de Septiembre de 1938 Prieto asiste y habla en el Consulado/Embajada de México en Barcelona con motivo de la tradicional fiesta de El Grito del cura Hidalgo.Es el Presidente Azaña el que evita esa embajada de Prieto, pues le quiere cerca,probablemente porque tanto Azaña como Prieto veían imposible ganar la guerra y pudiera ser preciso un gobierno Prieto que nunca se produciría luego. Ya se había cometido el error histórico, en el que insistirá Juan Simeón Vidarte, de que, pese a la voluntad del Presidente de la Republica, Indalecio Prieto no fue Presidente de Gobierno en Mayo de 1936 con la misión de evitar el golpe militar, que no consiguió Casares Quiroga, que lo fue por descarte ante la negativa del PSOE, es decir de Largo Caballero, vetando que Prieto formase gobierno.

Prieto, en plena sintonía con el General Cárdenas se instala en México.

Se ha polemizado mucho sobre cuestiones financieras y las ayudas a los refugiados pero, sin entrar en ello, este tiempo mexicano es muy fértil en el pensamiento político de Prieto, no obstante su mala salud y su distancia de la patria.

Está insuficientemente estudiada la acción política de Prieto, pero adelanto provisionalmente mi opinión de que mientras sus anfitriones  mexicanos se adentran en explícitar sus convicciones antiimperialistas, contra los yanquis, como ocurrió en muchos otros países americanos, Prieto busca el auxilio americano para un futuro gobierno democrático en España, con acercamientos en el Sur de Francia, en el repliegue de las guerrillas y en otras iniciativas, incluso a Gil Robles, Ansaldo y otros monárquicos juanistas. Prieto es un gran europeista, el más destacado de los españoles en las reuniones posbélicas de esa Europa que emerge en Francia, Inglaterra y, sobre todo, Holanda.

La acción de Prieto, del lado socialista, es la que, coincidiendo con su muerte en México, fructifica en el llamado contubernio del Hotel Regina de Munich, sobre lo que mucho me hablaron ya entonces Salvador de Madariaga, José María Moutas, Rodrigo Uría y Pedro Rodríguez Arango...y luego Ignacio Fernández de Castro, también antiguo alumno de esta Facultad,  a cuyo pequeño partido, FLP,pertenecería yo pasando el tiempo

En fin, Alcalde, acuérdate de la dignificación de la placa. 

viernes, 21 de abril de 2017

Telarañismo

Solo soy mosquita muerta para el hombre-araña.
A.M.F., Haiku inédito

Con motivo del ciclo de la Balesquida, al que vuelvo en la revista anual de la más entrañable y vetusta asociación ovetensista, reclamé atención para un personaje fascinante: Rafael Zamora, Marqués de Valero de Urría, cuyo lienzo, del pintor José Uría, se admira en el Museo de Asturias. Uría es padre de don Juan, súper balesquido, y abuelo de mis amigos Cheni, Paloma y Juan Blas. 

Zamora, que traduce en verso La Ilíada y La Odisea, enseña latín y griego a un joven Pérez de Ayala, ayuda a Clarín en su versión de Zola, habla también inglés y ruso, dicta lecciones sobre Baudelaire, Saint Säens y otros, tiene un único libro editado,"Crímenes literarios y meras tentativas escriturales y delictuosas: Máquina cerebral; Dogmas éticos; Banquete Anual; Aureas lavas; Los ojos del amor; El cuadrúpedo-dios. Perpetrados por el Profesor D. Iscariotes Val de Ur, Catedrático de Paleografía, Criptología y Zoophonía en la Universidad de Polanes / Publicados, comentados y precedidos de una biografía del mismo, por Rafael Urdeval, telarañista, su discípulo y albacea Iscariotes Val de Ur".Oviedo,1906.

Fue, además, Fundador de la Filarmónica, Presidente del Casino, Presidente de la Escuela de Artes y Oficios, Vicepresidente de Cruz Roja, administrador de Minas de Quirós, socio de Sargalelos...

Valero/Zamora utiliza ese curioso "telarañista" anterior al Gregorio Samsa de la Metamorfosis de Kafka (1912) y a Spiderman ("hombre araña")(1962). Nada que ver tampoco con el personaje de García Márquez que "comía huevos de araña". 

Los vaqueiros, entre otros, utilizaban tela de araña para cicatrizar heridas. Valero lo debía saber.

En cambio, por mi parte, la única vez que hube de usar chaleco antibalas no creí, por atribución a broma, o a mis malas entendederas idiomáticas, al funcionario de la ONU que me hablaba del forro ¡confeccionado de telaraña!

En mi conferencia, que no en la Revista, omití involuntariamente esa autodenominación arañista de Valero. Es de esperar que el libro, escaso en las librerías de lance, se reedite. El joven poeta Rubén Rodríguez Calvillo escribiría:Cómo explicar/que ya no quedan/recuerdos de aquel tiempo 

miércoles, 19 de abril de 2017

Presentación de La venganza del guerrillero de Alberto Polledo en el Club d La Nueva España


Presentación de CADAVAL,la venganza de un guerrillero

Sr. Teniente de Alcalde//Queridos amigos

Ni a pirueta llegó la lóbrega contracción de la muerte

Muchos entre ustedes habrán sentido como yo el dolor punzante de aquel último día de Terranova, que a la manera de Manolo Rivas, resultó cuando Alberto bajó persiana por última vez en Pelayo. 

La marca, aligerada por filtro de café, resurgió en plan guadiana, liberando al expertizado marquista a caminar más libre entre si cupiese de lo que ya lo hacía en su inagotable andanza, el ayalino sendero innumerable. 

a porfiar, sin límites, a la indómita vocación de escritor y costumbrista.

De librero a autor hay vecindad ante objeto, por lo general rectangular.

De trabajar con el tacto y la rememoración de títulos listados, o los escaparates, el salto al relato no es al vacío sino a la razonada sucesión numérica que un tal Moisés dio a los siete días del Génesis.

Esa continuidad de Alberto en la consecuencia consigo, es laboriosa también para los que le seguimos, a veces con maravillada perplejidad pues, por ejemplo, ahora, nos depara obra extraordinaria, descripción bucólica, técnicas cinematográficas de vanguardia y tragedia popular necesitada de cantor. 

Hay momento en que el escritor se pudo sentir tentado al mundo mágico detrás de unas gafas de alambre viendo en la oscuridad nochera, pero persevera en el método en el que ya abundaban modernidades narrativas.

Hubo diferencia estratégica en los tirados al monte por persecución y el bandolerismo de la década terminal del espanto.

Hay distinción para el historiador entre los que defienden la vida, y los que acosan la retaguardia, de los que el general Lister lamenta debió hacérseles más caso. Hubo también un tiempo esperanzado en los aliados.

Conocí en Francia a José Mata y, en México, a Arístides Llaneza y a Morán, dos concepciones de la guerrilla, defensiva o elemento bélico.

Alberto hace literatura, no historia, pero desde la excelsa mentira, que dicen Vargas Llosa, Vizcincey y otros, salen perfiles históricos auténticos.

Pérez Casado, Alcalde que fue de Valencia y de Móstar, desmenuza itinerario parlamentario de la diferencia de guerrilleros a bandoleros y aún la injusticia primaria de pasar página.

Alberto se confiesa seguidor de Delibes, aquel gran castellano que merecía el Nobel.

Si no lo supiera de su propia voz panteísta, habría adivinado la estela de Las cazas Las ratas, su regodeo gozoso en la Naturaleza y la adjetivación del protagonismo colateral de aves, riachuelos/regatos y picachos.

Pla aseguraba que el logro feliz era el adjetivo.

De los fugaos, como denominan Gerardo Iglesias y muchos otros asumiendo la calificación popular que también recoge Alberto, apenas se podía montar antaño relato objetivo.

Conocí en aquel Ateneo del entrañable Canteli y en la desaparecida Marchica, a Héctor Vázquez-Azpiri que escribió acontecidos propios, en absoluto de entraña política, con lo que la guerrilla se desfigura, aunque, apolítica, entusiasmara a Dalí. 

Conozco aún mejor a Manuel Arce, escritor asturiano y cántabro. Manolo, al que profeso gran afecto, me puso por carta, cómo hubo de burlar la censura en 1956 evitando cualidades humanas en su Bedoya y otros maquis

La situación está ya superada en la libertaria diosa de las Letras, que ha inspirado a Alberto.

Y permítanme evocar a Félix Espejo, al que admiré, cuya dedicatoria va en la primera del libro. También a Nicanor Rozada en cuyo homenaje interpreto la última frase.

Otra palabra para la magnífica factura de Laria. Ya he contado cómo tras mi accidente cardiovascular antes de recuperar lectura, lo hice con el tacto de los libros en el que se extiende Pérez de Castro...Tocarlos, pasar la mano dañada por los cantos, resultó grito profundo de sanación ritual para la posterior lectura, alivio definitivo.

Les animo a leer, sentir y pensar con Alberto. 

  • Gracias, querido amigo, por esta obra que resucita un trozo de nuestra historia y nuestra geografía que jamás debió perderse en la crueldad del Destiempo.

sábado, 15 de abril de 2017

Vivin/Ribadeo cerrado por el zarpazo del buitre

Cuánto he sentido el cierre de los Hermanos Vivin en el centro de Ribadeo. Como ha tiempo que dejé mi profesión de perito en leyes me he negado a conocer los detalles de los pleitos, que me consta son varios. Sin embargo, no pude menos de acompañar a estos amigos libreros, la profesión más admirable entre las que conozco de cerca. Mi corazón estaba con ellos pero también con Dionisio Gamallo, Daniel Cortezón y Candido Riesgo con los que me encontraba allí muchas mañanas de domingo mientras comprábamos la prensa. 

Vamos derechitos a un mundo sin libreros de lance, sin impresores artesanales... ¡Sin nosotros, los que los amamos desde el fondo de las entrañas!

La clausura, o traslado, forzada de los Vivin tiene algo de El ultimo día de Terranova de Manolo Rivas y del fin en la peatonal de la ovetense Pelayo de "Santa Teresa, mon amour!", como la califiqué sin ambages.

Cuando mi mujer y yo decidimos dejar Salinas por la ribera del Eo, sabía perfectamente que tenía en Perez de Castro, Moure, los Lombardero...a intelectuales de primera, pero no imaginaba esa comunidad ribadense de tantísima vitalidad receptiva y acogedora. Vivin forma parte esencial de ella. Por eso lo siento tanto!!

  1. En la red, un buen amigo me escribe:¡No seas pesimista! Los libros y las librerías jamás desaparecerán; las librerías de viejo -verdaderos santuarios del libro- tampoco. Lo peor es que, con la mayor intención del mundo, nos conducen a un tipo de sociedad en la que impera la cultura audiovisual; hablando en plata: "forgaxa". Que quiere decir personas sin espíritu critico, sin opinión autorizada, Justo lo que interesa al poder establecido, que el personal no piense para conducirlo como un rebaño de ovejas. Por todas estas razones lo que desaparecerán son los lectores. Una especie en peligro de extinción. Personalmente, me ocurre como a ti. Ante un libro que eliges: lo primero olerlo, lo segundo leerlo, lo tercero acariciarlo, para finalizar el proceso colocándolo en la biblioteca, habitación en la que pasas la mayor parte de tú vida y en la que, de vez en cuando levantas la mirada para contemplar las repletas estanterías y encontrar la paz del espíritu..

viernes, 14 de abril de 2017

Tapies en Cajastur;Valente en la Casa Consistorial y el Campoamor




No recuerdo la fecha en que encontré a Antoni Tàpies. Fue en la escalera de Cajastur, hoy Liberbank. El gran pintor bajaba con Teresa, su mujer, y los directivos Noriega y Troteaga. En rasgo provocador le obligué, entre el rubor de la comitiva, a improvisar un dibujín.

José Ángel Valente tenía el proyecto, que recogieron Bernardino, Isolina, Gustavo, Maricusa, Pedro, Sally y otros asturianos, ginebrinos como el gran poeta, de contratar un Tàpies sobre el 34 para una tirada gráfica muy popular, con simbólico pie desnudo. Ginebra no era sólo ya la ciudad de Calvino sino de un Borges al que encerraban con llave en su apartamento. Para mí, fue también de María Zambrano y los Saborit.

Un Tàpies en gran formato se ha hecho muy visto presidiendo el zizageante pacto entre Rajoy y Rivera. Antes, Ciudadanos y PSOE se colocaron debajo del digno cobijo de una imagen de Luis Martínez Noval. Ese acuerdo fue redactado por J.E. Serrano, brillante introductor de la obra de Ramón Gómez de la Serna, uno de los mejores prosistas de todos los tiempos.

Albert Rivera hizo sustituir a Tapies por otro artista, importante, pero en otra división, Martín Chirino. La Generalitat, tan plena de políticos ¡frescos por el trespercent!, mantiene un fresco grandioso desde el que hace proclamas de acomplejado localismo. Ahora, en el Palau de la Música, se atribuyen el quatre para Convergencia: ¡uno de los principales comparsas negociaba, próximo al esperpento, con las bodas de su hijas y se lucraba de sablazos a sus consuegros!

Valente dictó a un escogido grupo varias lecciones sobre La Regenta. Deberían  recuperarse, pues faltan en sus obras completas.

La Política se aleja de la Literatura y del Arte y cuando la realidad supera cualquier ficción como en el Palau o los Pujol no es grandeza sino podredumbre. Algún día un Javier Cercas o una Almudena Grandes, o aun Rosa Montero, Jesús Carrasco, Reverte, Muñoz Molina...hará gran novela sobre la miserable impostura. ¡Sin olvidar los  catalanes que utilizan magistralmente el relato en castellano...Marsé, Goytisolo, Mendoza...!

En cualquier caso, Tàpies y Valente, dos inolvidables y enormes mounstros de la gran Cultura, pasaron por nuestra tierra...¡no recuerdo fechas!



  1. Enviado desde mi iPad

jueves, 13 de abril de 2017

Miguel Ángel López despide a Gatti en el suplemento cultural de lne

Adiós a Gatti, escritor resistente de lenguaje comprometido

El autor de La pasión del general Franco desarrolló su obra en todas las variantes de la escritura y mantuvo vínculos con Asturias

13.04.2017 | 02:41
Armand Gatti, en la Casa de Cultura de Mieres, en 2011.
Armand Gatti reposará desde hoy junto a los grandes como él en el Père Lachaise, uno de los cementerios más literarios de París. Murió a los 93 años después de una vida intensa marcada por la entrega a la escritura en todas sus variantes. A través de esa dedicación desarrolló un vínculo con Asturias y su pasado combativo.

Armand Dante Sauveur había nacido el 26 de febrero de 1924 en la maternidad del Hospital de Mónaco, hijo de Auguste Gatti, basurero, y de Letizia Luzona, criada.

Desde el universo de la Utopía, donde siempre residió, los miembros de su tribu, Felipe el Indio, Rosa LuxemburgoFrancisco de AsísAntonio GramsciBuenaventura DurrutiNestor MakhnoJean Cavaillès, los pájaros y las ballenas, en especial el vientre de la que se tragó a Jonás y que aun hoy sirve de morada para toda su familia, los mineros de Asturias, sus Lulús, un payaso y el reloj de pared de una estación patagona, les invitan a cantar en su honor: En el Pozu María Luisa.

En el cementerio Père Lachaise de París muchos grandes aguardaban con impaciencia a un nuevo vecino, que llegará hoy. Su último casero Melies el cineasta, MolièreWilde y ApollinaireProust, representantes de cada uno de sus amados oficios, formarán el comité de bienvenida a este campo que nunca será un campo de trabajo forzado, es bien sabido que se trata de un "barrio" poblado por espíritus libres, creativos, del teatro, el cine, la poesía?y otros muchos quehaceres dignos de cualquier musa.

Cuando quien esto escribe empezó como profesor en la entonces Escuela Normal de la Universidad de Oviedo, ni él mismo recuerda cómo, se cruzaron en su vida las lecturas y las películas de un autor polifacético y poco conocido pero del que tenía ya una vieja referencia en español Con V de Vietnam, que había sido publicada años antes por "Cuadernos para el diálogo". El caso es que su autor, Armand Gatti, se convirtió en el referente de sus trabajos de investigación y en el extraño personaje que gustaba a casi todos sus alumnos. Y algunas veces, los alumnos pueden tener una vida más sorprendente e intensa de lo que podríamos llegar a imaginar, y, solos, ante el verde desvaído de un encerado, llevándose las manos a la cabeza como por olvido, confiesan haber formado parte, una vez, de la Tribu de Gatti en París. Era Manuel, el hijo de un ferroviario -como Durruti- que hasta que se fue, había vivido siempre en la estación de Soto de Ribera, y tuvo el privilegio de ser un Lulú.

En el verano de 2000, mientras disfrutábamos de las cigarras bajo un plágano majestuoso del patio del Museo Calvet, un plágano de los que solo en Aviñón saben cómo dar sombra a los grandes, esperábamos con entusiasmo una lectura de Gatti que versaba sobre Jean Cavaillès y ? apareció, enorme, con su habitual puesta en escena, folios al viento, brazos al cielo, "chupa" de cuero del mismísimo Durruti ... Ahí tuvo lugar nuestro primer contacto físico con aquel hombre casi tan imponente como el árbol al que abrazó y trató como a un compañero. Teníamos bastantes posibilidades de Gatti nos atendiera al final de su lectura, éramos asturianos de una comarca minera y eso resultaba un salvoconducto infalible, nos dejó disfrutar de su compañía.

Después, ambos pasamos a formar parte de su tribu, si bien, en mi caso, fue desde el principio algo más. Por algún motivo, se establecieron entre nosotros, lazos que Gatti aseguró se sellarían para la eternidad cuando él terminara su última obra. Entonces ninguno de nosotros entendió, pero Dante -Gatti- manifestó su deseo de que mi compañera y yo fuéramos los traductores de su obra al castellano. Se nos presentaba un durísimo trabajo al tiempo que un honor sublime al que no pensábamos renunciar y, así, durante años, tradujimos nueve obras recogidas en cinco volúmenes, publicados en la Editorial KRK: La pasión del general Franco (teatro); Muerte-Obrero (poesía); La vida imaginaria del basurero Augusto G (teatro); La Columna Durruti La Tribu Carcana ¿En guerra contra qué? (teatro); De la anarquía como un batir de alas (cuatro poemarios).

Y Gatti, por fin, conoció Asturias, tres veces invitado por la Universidad de Oviedo, y una por el Ayuntamiento de Mieres; la Universidad Autónoma de Madrid le invitó y con él fuimos invitados.

Aviñón, Itxassou, París y sus mil ocasiones, Carcasona, Neuvic, Plateau de Millevaches?Lugares comunes como también lo fue la calle en la que nació Durruti o el Pozu Fortuna, este lugar familiar para nosotros y para él, ocupaba su mente cuando, en las últimas revueltas de nuestros mineros nos escribió una carta que quiso hiciéramos pública en el Consejo de Europa y en la voz de Antonio Masip, diputado.

Hoy, solo queda por cumplir una promesa, la traducción de La traversée des langages su última obra, la que, en extensión, podría compararse a las grandes praderas de Illinois e Indiana, allí donde la familia Uccello, su familia, nuestras aves, batieron las alas y emprendieron el vuelo en busca del nuevo mundo, del hombre nuevo. Como las aves y las ballenas, los lenguajes hacen también sus travesías y es en ese periplo donde los seres humanos se aproximan y narran. A modo de conclusión podemos afirmar que la resistencia y la anarquía son los rasgos más importantes de Gatti, sin olvidar su lenguaje comprometido.
Compartir en Twitter
Compartir en Facebook

miércoles, 12 de abril de 2017


Un centenar de ribadenses arroparon a los empresarios Hijos de Vivín en su desahucio

Esta mañana perdieron el edificio con la librería que fundó su padre hace 88 años


Tal y como estaba previsto, a las 10 de la mañana se ejecutó el desahucio de los empresarios ribadenses Hijos de Vivín. Pablo y Salvador no estuvieron solos en este trance; un centenar de ribadenses los acompañaron y despidieron con aplausos.
No faltaron las críticas al apoderado de la sociedad que adquirió el crédito del Banesto -hoy Grupo Santander-. «Da la cara, Dositeo», le increpaban. Este abandono el lugar acompañado de agentes de la Guardia Civil.
VOTACIÓN
12 votos

ETIQUETAS
Desahucios Guardia Civil Banesto