sábado, 30 de marzo de 2013

Solana sería un buen Secretario General de la ONU


Javier Solana Madariaga es un fenómeno de la Naturaleza.

Este pasado lunes viajaba a los Estados Unidos, recién llegado a Madrid de un contacto Rusia/UE. Pronto tendrá 71 pero está en pleno dinamismo, incluso acaba de donar a Diego, su hijo, un riñón, en un acto de comprensible generosidad que no deja de conllevar un punto admirable.

Lo ha sido todo en política internacional europea (Ministro de Asuntos Exteriores, Secretario General de la OTAN, Alto Comisionado para las Relaciones Exteriores y de Seguridad, Secretario General del Consejo de la U.E....) pero, inagotable, creo sinceramente que sería el mejor para el puesto de Secretario General de las Naciones Unidas que ya toca para Europa, tras el fin del mandato del surcoreano Banki-moon en 2016.

Ya bien me sé que, en los pasillos bruselenses, Durao Barroso, Presidente de la Comisión Europea, se pretende como quien no quiere la cosa, candidato para el sillón neoyorkino. Deja su puesto bruselense en 2014, no siendo renovable. Se busca, además, que el nuevo Presidente de la Comisión, lejos de un consenso intergubernamental, esté al frente de la lista que gane las elecciones europeas de junio de ese año.

Entre Barroso y Solana no habría color.

No solo por el estrepitoso fracaso de la actual Comisión y de su Presidente estos nueve años, sino que, un poco que conozco a ambos, las diferencias son abismales; las trayectorias, la capacidad para solucionar conflictos y el entusiasmo por la paz mundial también.

España debería jugar fuerte en la renovación de las testas internacionales. ¿Hay candidato a la OTAN?, ¿lo hay a la Comisión? Si como parece, a expensas de lo que ocurra con las legislativas alemanas del próximo septiembre, el Gobierno de Rajoy opta por Merkel o un/una faldero/faldera de la Sra. Merkel el fracaso español sería manifiesto antes incluso de competir y, sin duda, espero que se refleje en el resultado electoral, pues no en vano se otorga más confianza en los ciudadanos electores.

No he oído nada que Javier pueda ser Secretario General de la ONU, pero tengo la corazonada de que podía ser muy bien recibido su nombre en una mayoría de países, y el nuestro debería apoyarle en un ejercicio de responsabilidad. ¿Quién conoce alguien mejor?


miércoles, 27 de marzo de 2013

Conferencia de auditorías

Invitado por EuroFinuse (The voice of Financial Services Users Across Europe) intervine ayer en un panel sobre Auditorías, con presencia del ponente Karim y del Comisario Barnier, en el que dio también lección Nathalie Berger, responsable del dossier en la DG de Mercado Interior.




Insistí en mi deseo de llegar a un acuerdo salvando el espíritu de la reforma Barnier, oponiéndome a la abracadabrante situación de que el Parlamento, tras aprobar el informe de iniciativa Masip Hidalgo sobre el Libro verde, vaya a recular ahora por presión lobística. Barnier, que estuvo conciso y brillante, insistió en su habitual posición apoyándose también en el informe británico de 22 de Febrero y en la nueva ley holandesa.

sábado, 23 de marzo de 2013

Chipre, de Afrodita a Omero



Raúl del Pozo, en una de sus columnas más logradas, llama a los chipriotas "paisanos de Afrodita":  "Antes de ser conquistada la isla por Alejandro, les machacaban con impuestos los fenicios, los persas, los turcos, los romanos, los ingleses y hace unas horas los alemanes".

De la posición riesgosa de Chipre vengo oyendo desde ha mucho. Mi buen amigo el diputado checo Richard Falbr, que habla perfecto español, su idioma materno, hijo de un brigadista de la guerra civil, le espetó en una reunión del Grupo S y D, al entonces Presidente, el comunista Dimitris Christofias, "¡ustedes son un país de ladrones!".

Fue muy duro. Falbr contaba con la opinión favorable de cuantos ven con preocupación el lavado del dinero negro ruso y los enjuagues financieros que conlleva. 

Ese caldo de cultivo, con el ánimo de incautar semejante capital extranjero, pudieron poner de consuno la troika y el nuevo gobierno chipriota, eludiendo quizá otras medidas, lo que jamás se sabrá con certeza. Ha sido un desastre que ha llenado de espanto a los ahorradores de Europa. Javier Solana se adelantó por las ondas a decir que la incautación de depósitos era una auténtica barbaridad, rompiendo su proverbial moderación juiciosa. La Comisión Europea, y su Comisario Olli Rehn, deben asumir su yerro descomunal aunque la solución no esté cerrada. Aún más si cabe el Ministro alemán de Finanzas, Schäuble.

El rescate hay quien dice que no es muy grande, pero en términos proporcionales resulta insólito que sea por el 100% del PIB, lo que ni por asomo había sucedido ni tan siquiera en Grecia, el gran contaminador.

En Roma hay una pequeña plaza llamada Nicosia a la que mi fallecido amigo el corresponsal de El País, Peru Egurbide, me llevó una vez a cenar. El Restaurante se llama "Due ladroni". Fue antes de que yo fuera eurodiputado y no sé si alguno de los saqueadores de Afrodita suelen pasar por allí, con semejante denominación contracultural.

Tampoco se entiende, o quizá sea demasiado evidente, que quisieron cargar contra los ahorradores pequeños antes de tocar el impuesto de sociedades que estaba en el ridículo 10%.

Y clama al cielo que los paraísos fiscales sigan indemnes, o casi.

No trato a Rehn ni a Schäuble pero sí a Omirou (que se pronuncia Omero), el Presidente del Parlamento. Incluso me entrevistó, en su despacho de Nicosia, la televisión chipriota cuando él no era aún diputado. El restaurante al que nos invitó luego a Eloína y a mí, a diferencia del romano, se llamaba "Makarios", como el líder legendario de la independencia y la "No alineación". Omirou se ha negado en redondo, en nombre del poder legislativo, a aceptar la operación esquilmadora del Ejecutivo y la troika.

Veremos...La Iliada tiene muchos capítulos y después sigue la Odisea.

Omero, que pide solidaridad, seguirá recitando su letanía. Amén.

martes, 19 de marzo de 2013

Vértice


Galería Vértice
 
Santa Cruz, 10

Oviedo

 
Queridos amigos:

Como una punzada en el alma he leído, en Carmen Ruiz Tilve, de vuestro próximo cierre, coincidiendo con la primavera.

No os visito tanto como hubiera debido, pero os tengo en la estima que bien sabéis.

Vuestra aportación cultural ha sido más que significativa en esta ciudad,  "bien novelada" pero no tan bien pintada. Recordaré siempre vuestra Vértice, un poco más arriba de mi casa de estos últimos años,donde antes nací.

lunes, 18 de marzo de 2013

Burloterapia



Recuerdo que en los noventa lo primero que hice en una visita a Chicago, que antes había conocido como universitario, fue visitar su Museo de Arte Contemporáneo.

Una primera obra sacaba despectivamente la lengua a los incautos visitantes.

Me sobrecogió como me ha vuelto a ocurrir con la temática constante, de un artista asturiano, Toño Velasco, del que apenas sabía nada.

Su catàlogo, "Ensayo sobre la burla", es impresionante.Me recuerda también la última exposición de los últimos días de vida de Bacon,en la Malbourugh de Madrid.

Velasco hace sacar la lengua también a Emilio Botín, a Ángela Merkel,a Sarkozy,a Rodrigo Rato...,al Duque Urdangarin escapándose por la ventana bajo la mirada regia...

Sus lenguas están al día; su burla y su Arte fabulosas e inquietantes

sábado, 16 de marzo de 2013

El ahogo




De chaval me tocó ayudar a un hombre entrado en años, o eso me pareció entonces, que apenas sabía el arte de nadar para salir del agua, en la concha embravecida de Salinas. Lo pasé muy mal contra la resaca, incluso el recuerdo me ha dejado una secuela de ahogo psicológico respiratorio en el almario de la remembranza. Llegué a imaginar muchas veces luego el hundimiento de los dos, dado el nerviosismo contagioso de aquel excelente dominguero. Por fin, la cercanía de un colchón neumático providencial, que nos tiraron desde la orilla, actuó de tabla salvadora, aunque hubo que ordenar cómo agarrarse para salir calmamente de un par de brazadas.

Coincidió con "el mosco", la hora que, en la jerga maravillosa de Delibes y de su inolvidable espacio del Duero/Esgueva, se ceban las truchas. Momentos para la luz del mediodía y el relajo panteísta, pero que en la mar cantábrica, si no se respetan sus embates, acaece distraídamente el peligro y hasta la muerte como sufrió Castro, aquel mítico portero de fútbol, hermano de Quini, que intentó también un rescate con trágica suerte.

La situación económica es muy mala. Alguna de las medidas que tan estúpida y estelarmente se toman empeora aún más la situación dejando a los rescatados al borde del colapso tal sucede en Grecia, Portugal y nos puede ocurrir en España si no se endereza mejor rumbo. No es solo la absurda y abracadabrante gestión de Economía en Bankia, que también, como Fernández Ordóñez ha denunciado, ¡por fin!

Es la española, y de la troika fanatizada (Comisión Europea, BCE, FMI), una actitud crasa, incluso temeraria, al borde del precipicio, con los llamados recortes, donde el remedio ha sido más nefasto aún que la ya muy grave enfermedad originaria. Se había sostenido por Kruggman, incluso hace ya meses Rubalcaba adelantó ese certero diagnóstico pero nuestra voz política no se escucha ni con apoyo académico. Es prédica de desierto. Nadie nos oye ni poco ni mucho ni nada, pues tales son el desprestigio de los políticos y de la Política en medio del nerviosismo y la depresión generalizados.

Desde hace semanas mantengo contactos abiertos sobre la situación europea, que es como hablar de las crisis, la económica y, como calificó a este periódico, José María Maravall, la mayor -no quepa duda alguna- política.

En la "Casa de los Alberti",  de Ciaño, en la dieciochesca ovetense del Pueblo, con las Juventudes Socialistas de Oviedo..., he tenido ocasión reciente de escuchar a escogidos compañeros, ciudadanos y amigos, con aportaciones que me han reconfortado en que existe una masa crítica, atenta a un análisis de los acontecimientos. Pronto también en Arenas de Cabrales y otros puntos de la geografía astur, pues mi concepción del cargo parlamentario solo tiene razón de ser en ósmosis con los electores de la propia circunscripción, por mucho que lluevan chuzos de punta y truene, en plena nieve, de forma indiscriminada. Formulo en todo lo que puedo una modesta aportación a la necesidad de armarnos contra Merkel, a la que comparé con el usurero veneciano de Shakespeare, Shylock, en carta personal que le entregué, (http://www.antoniomasip.net/2012/11/carta-angela-merkel_7.html),  lo que amplío también en: http://www.antoniomasip.net/2013/03/intervencion-en-la-agrupacion.html

Ya he escuchado varias otras apelaciones ingeniosas merkelianas: "la centella naranja", por su vestimenta, "el protón de Hamburgo", por su carácter de investigadora física, o, más taurinamente, "la Niña del Recorte", en contraposición a la beldad castiza, en gira por Alemania, de "La Niña de tus ojos"(Pé/Trueba). 

De aquí a poco, por encima de partidismos, superándolos, tendremos que unirnos en los mismos objetivos quienes coincidamos en actitudes de cajón (la integridad de la vida pública, la guerra a la corrupción, la buena gestión de los sagrados dineros públicos -no se puede gastar lo que no cabe ingresar- la integridad territorial del propio país...).

La Merkel no tendría seguramente empacho en ahogarnos, pero el pueblo alemán, curado que debería estar de varias guerras por germanizar Europa, espero forme parte del colchón que desde la orilla política ha de soltarse para el futuro europeo, "que será social o no será".


jueves, 14 de marzo de 2013

I wish a quick recovery to Swoboda

The leader of the Group of the European Parliament of which I am a member (Socialists&Democrats Group) is recovering from surgery. I wish my friend Hannes Swoboda a quick recovery. Aside from our parlamentary duties towards common goals, I share a strong bond with my austrian colleague Hoannes since we both admire Bruno Kreisky, of whom he was a close aide. 

Deseo un pronto restablecimiento a Swoboda


 
El líder del Grupo S y D, al que pertenezco, se repone de una intervención quirúrgica. Deseo al amigo Hoannes Swoboda un pronto restablecimiento. Además de las tareas parlamentarias en un objetivo común, me une al compañero austriaco Hannes, nuestra común devoción por Bruno Kreisky, del que fue próximo colaborador.

Sucios Deshaucios


La normativa española, que impide al juez que es competente para declarar abusiva una cláusula de un contrato de préstamo hipotecario suspender el procedimiento de ejecución hipotecaria iniciado por otra vía, es contraria al Derecho de la Unión según acaba de concluir el Tribunal de Justicia Europeo

miércoles, 13 de marzo de 2013

Reaction to the letter from the Moroccan ambassador

Dear President Swoboda:



We have received a letter from the Moroccan ambassador accusing the Members of the Sahara Intergroup, to which I have the honor to belong, of being "agents of Algeria".

For twenty years of my life, during Franco's regime, I was branded an "agent of Moscow." I find it unacceptable. Our group and the Parliament should not have the slightest consideration with that ambassador, especially when four of our colleagues have been rejected from Casablanca, one of them from our own S-D group. I was allowed, on the other hand, to attend the military trial of the Sahrawi youth in Rabat, which was a real outrage to human rights.

We cannot, dear President, ignore this situation. What happened is very serious and that letter aggravates it even more, in my opinion.


Antonio

martes, 12 de marzo de 2013

Reacción a la carta del embajador de Marruecos

Querido Presidente Swoboda:

Se ha recibido por parte del Parlamento una carta del embajador de Marruecos acusando a los miembros del Intergrupo,al que tengo el honor de pertenecer, de "agentes de Argelia".

Durante veinte años de mi vida, en el régimen de Franco, me tacharon de "agente de Moscú".

Me resulta intolerable y el grupo y el Parlamento, no han de tener con ese embajador la menor tibieza y consideración,máxime cuando acaba de expulsar de Casablanca a cuatro colegas nuestros, uno de ellos compañero del Grupo S. y D.A mí me permitieron asistir al juicio militar de Rabat a la juventud saharaui, que fue una auténtica aberración contra los derechos humanos.

No podemos,querido Presidente, mirar para otro lado.Lo sucedido es muy grave y esa carta a que refiero lo agrava más, a mi modesto entender.

Streisand y Peres


Barbara Streisand parece que cantará en el 90 cumpleaños de Shimon Peres. Yo me entero tras escuchar al Presidente israelí en el Parlamento Europeo de Estrasburgo. Ya escribí durante su discurso en mi cuenta de twitter (@Antonio_Masip) que no comparto parte de su discurso sobre la actitud palestina

Me gusta la Streisand, a la que ví un instante ha mucho en Nueva York, pero no me ha convencido en absoluto Peres en su largo discurso pues bien podría hacer mucho más por la Paz en Oriente Medio, en honor precisamente a aquel Premio Nobel que le dieron junto a Rabin y Arafat, ambos ya trágicamente desaparecidos.

Kasoulides, Ministro de Exteriores de Chipre



Mi amigo Ioannis Kasoulides ha sido nombrado Ministro de Asuntos Exteriores de Chipre. Con sumo afecto vino a despedirse y a agradecer la carta de felicitación que le había dirigido. Ya hablé de él en otras ocasiones en este blog. Bien recuerdo la visita que hicimos juntos a los campos de inmigración de Ceuta, Melilla y Canarias, también su denodada oposición a la pena de muerte en el mundo y su Presidencia de la Comisión parlamentaria que visitó el Sahara Occidental. Asimismo estuve con Kasoulides en otros puntos del Norte de África donde pude apreciar su particular, proviniendo del PP europeo, visión de los problemas de la Paz, Palestina y otros. Por mi parte, siempre le he apoyado en favor de un Chipre íntegro territorialmente, batalla que seguirá dando con clarividencia.




Le deseo lo mejor, pues sin duda la defensa de los intereses de su país coincidirá con los europeos.

Belmondo en Zaventem

Hace algún tiempo me encontré con Jean Paul Belmondo, en el aeropuerto bruselense de Zaventem. El popular actor utilizaba mi mismo servicio de sillas de ruedas. Si era difícil de imaginar con la limitación de deambulación que sufre, su pícara sonrisa es la inconfundible de siempre, que Godard y De Sica, entre otros, supieron inmortalizar.


Me prestó verle y me hizo reflexionar sobre cómo cualquier mortal, incluso los que tanto han corrido en las películas hasta "À bout de souffle" pueden precisar de estos paliativos asistenciales.


Jean Paul es dicharachero como cabía imaginar y en el aeropuerto tuvo la suerte de que le asistiese Nadja, una empleada marroquí, que habla perfecto francés. Sorprenderá que lo resalte pero la chica es la excepción, en un servicio que conozco bien, pues, situado Zaventem en zona flamenca, los empleados son casi todos de lengua neerlandesa materna y experimentan ciertas dificultades a utilizar, aunque la conozcan, la de Molière. No importa que el francés sea oficial en Bélgica o que trabajen en lugar tan cosmopolita, los encargados de los servicios prefieren entenderse en inglès.


Los de seguridad a cargo del chequeo de la detección de metales invariablemente te hacen la pregunta "¿nederlands, français, english?".

A Belmondo lo reconocen pero le hacen pasar el mismo rigoroso protocolo. La pregunta sobre el idioma del chequeo es, en cualquier caso, un tanto absurda pues luego no hay más preguntas ni vale para nada.

Olisqueado

Lo más peculiar me pasó una vez en la zona del control de metales de Estrasburgo.

Mientras los demás pasaban sin problemas, o con el leve engorro habitual de líquidos u ordenadores a mí me pusieron aparte para un reconocimiento especial.

¡Y tan especial!

La policía militar esperó por un perro enorme y me ordenaron le acompañara, ¡al perro! a un pequeño cuarto, estrecho, en el que apenas entrábamos los dos, ¡le chien et moi! Me acordé de una relojería del Madrid de Pérez Galdós en que un personaje grueso "solo podía entrar de lado".

El perro era tranquilón pero, de sorprendido quizá, ni me miraba ni me olisqueaba apenas.

Al poco entró el policía que se ocupaba ¡del perro!, y me dijo que debía ponerme de pie y apartarme ligeramente de la silla de ruedas. Al otro lado de la puerta del cuartucho oí la voz del encargado, ¡de mi silla y mío, no del perro!, que protestaba airadamente. Entonces el policía se puso a reñir y a asegurar que cumplían, ¡el perro y él!, con su deber y que se callara, pero como quiera que mi voluntario e improvisado defensor continuaba en su alegato de que "me conocía, era yo europarlamentario" y no sé cuántos habían pasado sin semejante control, noté que la cosa podía complicarse y durar, por lo que intervine para ofrecer que el perro terminara de cumplir con su supuesto deber. Sin embargo, no había sitio para el perro, el policía, la silla y yo mismo fuera de la silla, apoyado levemente como estaba luego en el encargado de la silla.

El policía entonces me permitió salir sentado en la silla, para lo que los tres hubieron de apartarse con lo que quedaron dentro el perro y el encargado, que habrá sido bien olisqueado pero no yo, quien se supone era objeto de semejante segundo y minucioso control.

Enseguida llamaron al vuelo y una azafata de tierra me condujo a la carrera, lamentando:

-Éstos franceses...como Asterix u Obélix habría dicho "Estos galos".

lunes, 11 de marzo de 2013

Juan Álvarez, amigo del alma


Se nos ha muerto Juan Álvarez.

Era un personaje cuya íntima amistad conmigo sorprendió a muchos.

Cuando por todas partes se lamenta la corrupción del urbanismo municipal y surgen escándalos palmarios y aun  prácticas aberrantes son todavía secretos a voces de la ignominia, yo tuve la suerte de tener unos colaboradores honrados y leales al servicio público

El pasado lunes, tras retrasarse mi vuelo semanal con el imponderable de la razonable huelga de los trabajadores de  IBERIA tuve la última oportunidad de visitarle en el hospital.  Se emocionó y me emocioné pues ambos pensábamos que podía ser la postrera y simbólica vez que nos viéramos. A él, como profundo creyente, no le faltaba la esperanza, que alimentaba con un profundo conocimiento de la teología de vanguardia y una práctica muy tradicional. En un momento dado dirigiéndose a Carlos Fernández Llaneza, a nuestra común amiga Dra. López,  a mi mujer y,  sobre todo, a mí, pronunció las que recogí como sus últimas palabras sobre la colaboración de tantos años: “Casualmente me han traído a una habitación en que se divisa La Florida, la obra de la que me siento orgulloso y que deberías reivindicar mucho más”. En efecto, bien recuerdo su empeño de abrir el bulevar para lo que me hizo visitar el éxito de calles semejantes en otras ciudades. No en vano, Alberti y Neruda asociaban las grandes avenidas a la Libertad, como la canción de Labordeta al que ambos conocimos cuando luchábamos en el tardofranquismo. Lo cuento en mi “Con vistas al Naranco”, monte totémico que a la manera de nuestro admirado moscón Valentín Andrés Álvarez, era la otra obsesión de Juan.

También era un tipo desesperante en sus lentitudes gestuales, pero tan entrañable que a todos convencía por su ilimitada bonhomía.

No solo practicó un urbanismo moderno en Oviedo sino que antes en Gijón, como asesor del alcalde Palacio, tuvo grandes éxitos con unas negociaciones atípicas por la que acuñó el nombre de “el Coralín”, por un tratante de feria, famoso en ese tiempo.

De esos corales sin tacha vive su ciudad de adopción y no puedo menos de evocarlo aunque me consuma en lágrimas y vaya a estar ausente de su despedida en Grao por cumplir mi deber, como le hubiese gustado siguiese haciendo, a muchos kilómetros.

sábado, 9 de marzo de 2013

Intervención en la Agrupación Socialista de Oviedo


Compañeros y compañeras

Gracias, compañero Secretario General, por la invitación a perorar sobre el instante europeo, junto a personas tan cualificadas y amigas, autoridades encomiables que son Paz Andrés y Leopoldo Tolivar.

Esta Agrupación está saliendo de un sueño ensimismado, largo y excesivo.

Lo celebro;  a la vez que te lo agradezco Secretario General, a ti, a la Ejecutiva y a todos los comprometidos en tan loable objetivo.

Estamos ante una Conferencia Política abierta, que es tanto como decir que nuestro periodo de reflexión se aproxima a una reformulación de nuestro pensamiento, adaptado a los requisitos de la nueva hora. 

Lo dice Ángel González, nuestro gran poeta y amigo, en los versos que nos cedió para la entrada de esta Casa del Pueblo.

Se precisan palabras nuevas antes de que sea tarde.

Hemos estado hablando hasta el hartazgo de que Europa era la solución, jamás el problema.

Nos guiaban, de consuno, Ortega y Felipe González.

Y llevaban razón.

Lo dice muy bien Ricardo García Cárcel en “La herencia del pasado”, pues el ánimo por normalizarse con Europa de la sociedad española hizo más por la democracia y la libertad que todas las organizaciones clandestinas españolas.

Y os lo asegura quien desde muy temprana edad ha trabajado todos los días de su vida por esa ansia de democracia y libertad. Un compañero vuestro que ha visto vivir, y hasta morir, a cientos de militantes y luchadores admirables.

Lo decimos Pablo Sánchez y yo mismo en nuestro "Europeos pero incorrectos”: "Felipe González tiene muy claro, como Ortega y otros regeneracionistas, que Europa es la solución, aunque las condiciones de entrada no van a ser ventajosas para nuestras frutas y hortalizas. Jacques Delors, un ministro de economía más bien gris de François Mitterrand, va a dar un impulso sin precedentes a la agenda europea desde la Presidencia de la Comisión. Jacques Delors, siguiendo los principios de Schuman, va a plantearse dos grandes proyectos concretos que mejoren la vida de los ciudadanos europeos y en dos mandatos, lo que lleva Barroso por ahora, va a dar el salto de gigante que supone pasar de un mercado común defectuoso a un mercado interior más sencillo y de una sistema monetario europeo (en torno al ecu) al nacimiento del euro en una unión económica y monetaria en ciernes perfilada en el Tratado de Maastricht de 1992. Delors, al contrario que Barroso, no va a dejarse doblegar por los intereses nacionales y va valerse de su prestigio para defender el interés comunitario. Barroso, en cambio, cuya elección apoyamos los socialistas españoles como baluarte de los intereses de la Europa del sur, va a presidir una Comisión débil que pierde su autoridad y su fuerza de tanto plegarse a las demandas de los gobiernos y es ninguneada repetidamente, hasta el punto de que Alemania, seguida por Francia, se permite amenazarle con su desaparición y la supervisión desde Berlín de las políticas europeas." 

Estamos en completa crisis.

Hace unos días leí, en la prensa local, una declaración de José María Maravall, preocupado porque la crisis política es aún mayor que la gravísima económica.

 Claro que sí.

 Ni Ortega ni el Felipe de 1982 hubieran podido predecir lo que está ocurriendo y la atribución social de tantos ciudadanos libres con Europa de muchos de los problemas que nos acechan.

 Tuvimos razón todos en España identificando Europa con la solución; porque Europa era la solución para una España exhausta por la falta de libertades.

Pero nuestro error es que sigamos identificando aquella Europa idílica de la libertad formal con los nuevos retos de la globalización y la crisis total que sufrimos.

 La receta ya no es, ni puede ser la misma.

El mundo ha cambiado.

Entre 1939 y 1941 el escritor judío austriaco Stefan Zweig escribió sus memorias que se publicaron bajo el título de “El mundo de ayer”. En ellas hace un recorrido por la sofisticada Viena de su infancia; la Viena de Klimt, de Freud, de Mahler. Retrata también la crónica del ocaso de aquel mundo que creía firmemente en el Progreso; en el imparable avance de la Humanidad.

Un mundo de recuerdos que, para Zweig, ya no existía. Había sido borrado de la Historia por la barbarie. Tal vez por eso, en un último esfuerzo, trataba de atrapar al genio europeo que creía moribundo para que, al igual que el efrit, el Genio de las Mil y Una Noches, permaneciese discretamente agazapado en la lámpara a la espera de ser llamado de nuevo. De una nueva oportunidad. Con un guiño de complicidad subtitula su obra “Memorias de un europeo”. Un europeo que nunca quiso dejar de serlo. Se suicidó en 1942 convencido de la victoria del Eje.

Creo que, como vivió la generación de Zweig y otras muchas anteriores, estamos ante un momento en que sabemos que hemos dejado atrás un mundo. Ahora es ya un mundo de ayer. Un mundo que no existe. 

Un mundo que no volverá.

Y, al igual que ocurre en el caso de Zweig, eso nos produce una mezcla de melancolía y miedo. Miedo que se transforma en punzante angustia cuando contemplamos, y sufrimos, las consecuencias que está teniendo este cambio sobre el modelo productivo y nuestro sistema económico basado en el consumo y en una expectativa de crecimiento permanente.

Sin embargo una de las conclusiones que pueden extraerse es que, a diferencia de lo que creía el autor austriaco, Europa no sucumbió a su viaje al final de la noche totalitaria. Antes al contrario, fue capaz de sobreponerse. Y lo hizo de forma heroica.

Cómo no recordar el Berlín de Germania Anno Zero o la Città Aperta que era la Roma de Rossellini.

Europa fue capaz de fundar un proyecto político que cristalizó en la Unión Europea, que ha traído paz al continente y al mundo, y prosperidad a los pueblos. Una utopía que ha conseguido equilibrar la protección de los derechos individuales y colectivos. Un éxito. Pero un proyecto inacabado, que debe avanzar.

No debemos caer en la desesperanza de Zweig, aunque la zozobra ambiental anime a ello...

Dante ya nos advirtió que el abandono de toda esperanza es la máxima que enmarca las puertas del Infierno.

 Uno de los aspectos que se pueden comprobar en el Mundo de Ayer es que, pese que se trate de una búsqueda de un tiempo perdido, nos es posible apreciar una constante melodía europea en la que nos reconocemos. Ideas y valores que identificamos como europeos y que sabemos presentes. Al igual que en la Scheherezade de Rimski-Kórsakov, pese a los paisajes extraños o las exóticas aventuras de los personajes, las voces del Sultán o de la Princesa nos resultan siempre reconocibles.

En este sustrato europeo, fruto de una cultura común, la fraternidad ocupa una posición destacada.

Es importante. Porque este es, en mi opinión, el tiempo de la solidaridad.

No de una simple solidaridad de hecho a la que aludía la Declaración Schuman que condujo a un protagonismo excesivo a los mercados. Sin duda ha sido este exceso el que, en parte, nos ha enredado en la situación en la que ahora nos encontramos. Hablo de una solidaridad más profunda entendida, como dice la Real Academia, como la adhesión a la causa o a la empresa de otros. Una causa, una empresa que no es sino Europa. Y que, mediante la adhesión, hacemos nuestra.   

Esta solidaridad está en nuestra identidad como socialistas y es lo que, en mi opinión, determinará que Europa sea capaz de afianzarse no ya como una entidad cultural sino como un actor político al mundo del siglo XXI. Y no olvidemos que, sin caer en el proselitismo, que lo que Europa representa merece ser escuchado en el mundo que viene. Sin temor a equivocarme creo que, como Zweig, es imprescindible que lo sea.

Debe destacarse especialmente la perspectiva intergeneracional de esta fraternidad.

Es por todo ello que los socialistas no podemos consumirnos siendo los meros comparsas de esa Europa absorbida por los mercaderes.

Alguno sabe, sin duda, de la carta que personalmente entregué a Ángela Merkel, acusándole expresamente de su nefasto papel de Shylock, el mercader shakesperiano de Venecia, reclamando el precio de su usura, la libra de carne más cerca del corazón.

Al denostar, como incluso llegó a decir premonitoriamente el canciller Kohl, padrino de la Merkel, "Una Europa alemana" cuando ha de ser una "Alemania europeizada", hemos, no obstante, de tomar todo lo positivo que aporta ese gran país al conjunto y no solo como el país más rico y poblado.

Ahí están los logros en participación social

Ese diálogo social y sindical que se está quebrando en España y que es clave para evitar la inestabilidad social.

Modelo alemán, y europeo, que no es el del Reino Unido ni el de los Estados Unidos.

Por eso hay que tener mucho cuidado cuando crece exponencialmente el antigermanismo, que no ocurra como pasó otrora con el “Yanquis, go home!” que las diferencias con la política alemana, que no con Alemania, nada tienen que ver con aquel imperialismo, déspota y nada dialogante precisamente.

Ha llegado, en cualquier caso, la hora de que un cierto baile festivo haya terminado.

Los socialistas, y más ampliamente los socialdemócratas y los progresistas, tenemos que jugar nuestro papel de siempre, ponernos a la cabeza del descontento de los depauperizados.

Hacerlo con clarividencia, tacto político, pero radicalidad y lealtad a nuestros orígenes y a nuestra razón de ser, críticos y militantes consecuentes.

Y en ese momento nos encontramos con que nuestros yerros políticos nos han desprestigiado ante nuestros pueblos y no se escucha nuestra voz. Ni poco ni mucho.

No es audible.

Todos habréis tenido esa experiencia en que vuestros habituales círculos de influencia. Rubalcaba ha pedido que escuchemos y que si escuchamos bien no nos va a gustar lo que oiremos de nosotros mismos

Él mismo Alfredo Pérez Rubalcaba viene diciendo desde ha mucho que los recortes no son la solución, que sin crecimiento, sin políticas de crecimiento, los recortes auguran más crisis y empobrecimiento.

Y ahora todo el mundo lo dice, incluso ya sectores de la patronal y de la más rancia derecha, pero nadie reconoce que alguien lo dijo muy clarito, porque no se nos oye.

Hemos perdido la credibilidad necesaria para que un político pueda compenetrarse en el liderazgo social.

Y no hay otra política que encarar los recortes y a su mayor exponente de política antisocial, la Señora Merkel, la usurera que reclama el ahogamiento de los países del Sur de Europa para que paguen a sus bancos que prestaron irresponsablemente su dinero, fomentando la burbuja inmobiliaria y otros males hoy detectados pero que nosotros mismos no tuvimos el valor de pinchar.

  Recortes y recortes; y los bancos privados que prestaron a Grecia a manos llenas no tienen deudas, o no las van a tener del deudor griego, pero se la han traspasado a la Banca Pública y a los sacrificios en algún caso insufribles. Portugal es también, como le he oído decir a Rubalcaba, también el paradigma del ejemplo paneuropeo.

Y es que la política sigue teniendo mucho de maniqueísmo. Se está como falderos de la Merkel -lo ha dicho claramente hace unos días Salvador Garriga, él (leamos ellos) está a favor de la Merkel sin lugar a vacilación- o estamos a favor de otra Europa, que sin desdeñar sus valores de libertad y de cultura, cambie de tercio, en contra de los recortes, al menos de ciertos recortes que nos hunden, y en pro del crecimiento.

Rubalcaba fue el primero en decirlo en el páramo, insisto.

Y ahora Francois Hollande afronta un frente dentro de la UE, que no es ninguna quimera y que ha de pulirse.

Anteayer mismo estuve con Moscovici, el Ministro de Economía francés, en el Parlamento europeo, al que, por cierto, bien conozco como compañero del grupo en la legislatura anterior.

Esta mi reflexión ya la expuse, dentro del partido, a los compañeros de las Juventudes de Oviedo y a los de Langreo que tuvieron a bien invitarme a perorar estos días pasados sobre esta misma cuestión

Como dice muy bien Enrique Barón en su libro, "Más Europa, ¡unida!", el Parlamento en el que hago armas políticas en la representación que habéis tenido a bien encargarme, es una "escuela de ciudadanía compartida". Y yo quiero aprovechar la Conferencia política, vuestra invitación y la recta final de la legislatura para aportar un grano, que no hace granero, como digo en la primera página de "Europeos, Pero Incorrectos", que apoya al compañero en la búsqueda de una alternativa definitiva, que dejando el servilismo al mercado y a los mercaderes, nos convierta en acicates para una gran transformación en la salida prevista para junio del 2014. Para entonces hemos de estar al frente de la gran marea de descontento que acabamos de constatar por doquier; también en Italia, escuchando para ello, humildemente a los que sufren como debimos hacer siempre.

  En Italia salvo castigos como el de Monti, no se ha estado contra Europa, sino que se vota con la espada encima, en el pecho, de la crisis.

Nos corresponde desbrozar el camino.

Nos es exigible la clarividencia para sacar a Europa adelante, haciendo frente con un programa y un liderazgo.

Y en cuanto a este, parece que el nuestro será el del actual Presidente del PE, Martin Schulz, con unas formulaciones muy contrarias a la política Comisión Europea/Barroso/Merkel.

El más reciente pronunciamiento de un parlamentario popular en Asturias, es que ellos siguen a Merkel (Garriga, dixit).

Evidentequerido Watson.

Es la tradicional dialéctica. Los españoles deberán ver con quien han de estar, pero ojo también nosotros mismos cuál es la aportación, pues he hablado de Schulz, pero, desde aquí, desde mi Agrupación, digo desde ya, que no podremos aceptar al amigo Martin si tras las decisivas elecciones alemanas de Septiembre se produjera el más mínimo atisbo, que espero que no, de resolver la gobernabilidad de ese gran país con un Grosse Koalition que algunos propugnan.

Espero que esto esté claro. Nada de mamporreros en la reconstrucción de una Europa solidaria

El liderazgo socialista y socialdemócrata europeo debería ir, entonces, por otros derroteros, quizá Paul N. Rammussen, el danés que conocemos bien y que no se entregará.

Gracias, compañeros.