viernes, 19 de marzo de 2021

EUROPEÍSMO VS. FARMACEUTICAS

 


Hay revuelo con las ostentadoras de vacunas. No he leído la copiosa documental, pero, simple ciudadano con diez años de know how en la sala de máquinas de la Comisión JURÍDICA del Parlamento Europeo, sugeriría aumentar y agilizar competencias.

MÁS EUROPA, acaba de pedir García Margallo, antiguo colega en Deusto y Bruselas. ¡Claro que sí! La oportunidad viene como respuesta a la siniestra beligerancia farmacéutica, aunque también porque el Brexit propicia mejor arquitectura institucional.


Es paradójico que pequeños comerciantes se debatan en el falso dilema de sanidad o economía, mientras grandes comercializadores siguen poniendo obstáculos para popularizar mundialmente éxitos científicos.

 Los británicos volverán pero deberían reencontrar traje mejor fruncido y entallado. El prestigioso empresario astur Francisco Rodríguez epiloga su nuevo libro: DESCARRILAMIENTO, QUIÉRASE O NO: EL BREXIT. Ya en sus obras anteriores (DESDE UN TREN DE MERCANCÍAS; EL TREN PROSIGUE RECORRIDO; PARADA PERO NO FONDA) Rodríguez gustaba metáfora ferroviaria que desembocaría, para mí, en EUROPA, ESTACIÓN TERMINUS.

Hay gran reto ante talentuda, o disyuntiva tontuna, utilización de fondos europeos. Ojalá tengamos pronto motivos para terminar proverbial escepticismo, que me preocupa hasta la obsesión.

Un personaje de Ian McEwan lamentaba que, en el entonces de la novela Chesil Beach, el  premier Harold McMillan pretendiese entrar en el club endemoniado que preparaban en el Continente. Aunque no acepten Hungría y algún otro la imprescindible velocidad, es hora para marco más amplio a la Comisión, iniciativa al Parlamento y agilidad a la judicatura.

La pandemia, tal pronostican tantos, pasa, pero hay lecciones no solo en el campo sanitario, que también, sino en la arquitectura institucional. Los problemas no se resuelven con mero voluntarismo o por la manifiesta potencia consumista de centenares de millones, ni por único, hoy, amplio espacio del mundo con Derechos Humanos, capaz de encarar a quienes los desafíen.  

La UE necesita instrumentos evitando disfunciones, limitaciones e incapacidades manifiestas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

ok,don ANTONIO.E

Anónimo dijo...

Muy bueno y preciso análisis, más Europa, más Europa es el momento. Porque el huevo de la serpiente está y no agazapado JmC

Anónimo dijo...

Pues si ..F