martes, 15 de octubre de 2019

EN MIERES INVITADO POR LA FUNDACIÓN ANDREU NIN .LNE/CUENCAS

Erice: "Ningún movimiento revolucionario triunfa frente a un Estado fuerte y sólido

El profesor de Historia participó con Alberto Rosón, Verónica Rodríguez, Sergio Gutiérrez y Antonio Masip en un debate sobre Octubre del 34

14.10.2019 | 00:57
Por la izquierda, Alberto Rosón, Francisco Erice, Verónica Rodríguez, Sergio Gutiérrez y Antonio Masip, durante el debate celebrado en Mieres.
"Una de las enseñanzas del 34 es que ningún movimiento revolucionario triunfa frente a un Estado fuerte y sólido", manifestó el profesor Francisco Erice, en el debate organizado por la Fundación Andreu Nin de Asturias con el título "Enseñanzas de Octubre del 34 para el conflicto social hoy". El acto, que contó con la colaboración del Ayuntamiento de Mieres y el Club LA NUEVA ESPAÑA DE LAS CUENCAS, se integra en el conjunto de actividades de las Jornadas conmemorativas del 85 aniversario de la Revolución de Octubre de 1934".
El concejal de Memoria Democrática del Ayuntamiento de Mieres, Sergio Gutiérrez, destacó la existencia de ciertas similitudes en la situación política europea actual y la de los años 30. "Es alarmante el avance de la ultraderecha en países como Polonia y Hungría", dijo el edil, para el que el proceso revolucionario del 34 tiene justificación. "La República estaba siendo amenazada por la ultraderecha", señaló. "En este modelo de desmantelamiento industrial ya no existe la gran concentración de trabajadores y vamos hacia el empleo individual, precario e inestable", añadió Gutiérrez, que ve en la pérdida de derechos una causa común de reivindicación. "En el 34 había un mayor sentimiento colectivo; hoy ha triunfado el individualismo y las organizaciones sociales han de adaptarse a esta nueva situación", concluyó el concejal.
En representación de la Fundación Anselmo Lorenzo intervino Alberto Rosón, que lamentó la falta de interés por "hacer memoria". "Antes había conciencia de grupo; hoy es una competencia por el puesto de trabajo", resaltó Rosón. "El modelo del 34, de grandes ejércitos de trabajadores unidos por la fraternidad y la solidaridad, hoy no se da en absoluto", añadió el activista, para el que el Octubre del 34 asturiano no fue un golpe de estado contra la República, sino "un proceso revolucionario puro y duro". "La clase obrera, que sólo halló represión, acabó levantándose contra un sistema de explotación. Fue una revolución social para cambiar el mundo y la forma de vivir", manifestó Rosón, que finalizó su intervención haciendo un reconocimiento a "nuestros padres y abuelos, que lucharon para dejarnos un mundo mejor".
A continuación, Francisco Erice, miembro de la Fundación de Estudios Marxistas, coincidiendo con Rosón en la visión revolucionaria de Octubre del 34, considera un error "la estética de la derrota". "Los revolucionarios perdieron porque eran más débiles; hay que asumirlo y estudiar cómo hacer para, la próxima vez, ganar", dijo el profesor, que ve difícil plantear enseñanzas en contextos históricos tan distintos. "Necesitamos unidad entre los que desean la igualdad y la hermandad, y una organización que proyecte el anhelo de cambio social", concluyó.
Acto seguido tomó la palabra el veterano militante socialista Antonio Masip, que comenzó su alocución de modo contundente: "Octubre del 34 fue un auténtico error cometido por los socialistas", afirmó, apoyándose en las opiniones de destacados dirigentes, desde Indalecio Prieto y Barreiro a Peces Barba. "Fue un yerro de la izquierda y de mi partido", remachó el ex alcalde ovetense. "Pero tampoco es justo que a los revolucionarios se les achaquen hechos tan graves como los incendios del Campoamor y la Universidad: el primero fue responsabilidad de Camilo Alonso Vega y el segundo, de la aviación republicana", sostuvo el exeurodiputado.
Por último, en representación de la Fundación Andreu Nin de Asturias, Verónica Rodríguez llamó la atención sobre las actuales lineas de actuación de la izquierda. "Parece que la revolución ya no forma parte de sus estrategias", señaló. "Hoy se mantiene una violencia estructural contra las capas más desprotegidas, una violencia más sutil ejercida desde unas instituciones burguesas que no consienten grandes cambios", prosiguió Rodríguez, que ve en el feminismo y la ecología nuevos campos de lucha revolucionaria. "La clase obrera actual ha sido desestructurada, a pesar de que sus problemas sean parecidos a los de los años 30", añadió. "Hay que sacar lecciones de la debilidad y los errores del 34, y recuperar el horizonte revolucionario que hoy no está en la mente de las organizaciones de izquierda", finalizó.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno
Lamento no haber podido acudir
Sigo en el pueblo
Un abrazo M